Sector inmobiliario

La diferencia entre constructora y promotora es una duda que surge a menudo entre compradores de obra nueva y en el sector inmobiliario en general. A menudo se usan los términos indistintamente, aunque se trata de figuras con funciones muy distintas dentro del desarrollo de un proyecto inmobiliario.

Conocer la diferencia entre ambas no solo es útil para entender mejor el sector, sino también para tomar decisiones más informadas. Por eso, en este post vamos a hablar sobre esta diferencia y explicar ambos términos en profundidad.

Qué es una promotora inmobiliaria

La promotora inmobiliaria es la empresa responsable de gestionar y desarrollar un proyecto inmobiliario desde su concepción hasta la comercialización. Desempeña un papel más estratégico y abarca aspectos como:

• Localización y adquisición del suelo.
• Diseño del proyecto, en colaboración con estudios de arquitectura e ingeniería.
• Gestión administrativa, incluyendo licencias, permisos y financiación.
• Coordinación de los agentes involucrados, incluyendo la constructora.
• Comercialización de las viviendas, una vez lanzado el proyecto.

En resumen, la promotora inmobiliaria asume el riesgo empresarial y financiero del proyecto, y se encarga de supervisar que todas las fases se desarrollen según lo planificado. Aunque los aspectos de los que se encarga pueden variar los enumerados anteriormente son un buen resumen.

Qué hace una constructora

La constructora, por su parte, es la encargada de ejecutar la construcción, siguiendo las directrices técnicas y de diseño previamente establecidas por la promotora y los arquitectos. Sus responsabilidades incluyen:

• Planificación y ejecución de la obra.
• Coordinación de los recursos humanos y materiales.
• Supervisión técnica y control de calidad.
• Cumplimiento de los plazos y la normativa vigente.

La constructora aporta el conocimiento técnico y operativo necesario para convertir en realidad los planos del proyecto.

Constructora y promotora ¿pueden ser la misma empresa?

Puede que el origen de la confusión sea este. En algunos casos, especialmente en grandes grupos empresariales, constructora y promotora son parte de la misma empresa. Esto permite optimizar tiempos y recursos, así como tener un mayor control sobre el desarrollo global del proyecto. Sin embargo, incluso en estos casos, las funciones suelen estar claramente diferenciadas a nivel organizativo.

¿Por qué es importante esta distinción?

Los compradores deberían ser capaces de identificar correctamente a constructora y promotora, especialmente para saber:

• La solidez financiera y experiencia del promotor.
• La reputación técnica y la calidad en la construcción de la constructora.
• El cumplimiento de plazos y garantías posventa.

Además, conocer esta diferencia también permite comprender mejor la cadena de valor del sector y las responsabilidades que asume cada agente.

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